Hoy, precisamente en el día que algunos celebran y otros critican (¡a mí, con tal de que sea fiesta, me da igual!), se cumple un mes de haber empezado las clases en mi Comunidad. Día arriba o día abajo para las otras. Un mes en el que han sucedido algunas cosillas interesantes y en el que, de nuevo, vuelven a ser los iletrados pedagógicos, los que vuelven a potenciar determinados experimentos en las aulas.
Voy a ser un poco desordenado cronológicamente en este segundo número. Espero que me lo permitáis…
"La memoria no funciona como un músculo, y entrenarla no la hace mejor" (elconfidencial.com)
Quiero pararme en un primer momento en una entrevista que hacen a alguien que, al menos para mí, es uno de los profesionales más capaz y moderado, a la hora de hablar de neurociencia. Lo siento, a mí que uno sea biólogo, le da más caché para hablar de efectos del cerebro en el aprendizaje, que un maestro. Soy así de raro. Al igual que para hablar de lo que sucede en un aula de Infantil o Primaria, antes voy a acudir a un especialista.
¿Qué se dice en la entrevista, publicada, como siempre que se trata de temas educativas, o bien en el apartado “economía” de los medios o, como en este caso, en el apartado de “alimentación”? Pues algunas cuestiones interesantes. Entre ellas, más allá de vender el nuevo libro del entrevistado y su posición de perfil cuando se trata de temas políticamente sensibles (como pueden ser la lengua), de la necesidad de saber más para poder seguir sabiendo más. Que como más se sabe, más se puede, accediendo a esa memoria, realizar un aprendizaje más completo. La memoria como herramienta y no como objetivo. Quizás lo resumiría con esta frase. Una frase que no queda muy bien en los congresos educativos, ni en esos publirreportajes de los tipos y tipas, enfundados en cuero, normalmente procedentes del Banco Mundial o desertores de la tiza de la época de los dinosaurios. Nada, leedlo. Es interesante.
Hay un tema muy importante que dinamita, tanto el proceso de concurso de traslados docente como todos los procedimientos que incluyan “la antigüedad” como mérito. Un mérito que, a partir de ahora, por sentencia judicial firme, debe incluir los años que uno ha trabajado como interino, cuando acceda a la plaza de funcionario, al mismo nivel que los años trabajados como funcionario de carrera. Ello conlleva múltiples perjuicios ya que, de golpe y porrazo, los que aprueben por el proceso de consolidación (profesionales con muchos años de servicio) van a pasar delante, tanto en el concurso, como en las plazas en las que sean asignados como “definitivos”, por delante de muchos funcionarios docentes que aprobaron un concurso-oposición. ¿Es injusto? Yo creo que sí. Lo de cambiar las reglas de juego a mitad del mismo no lo veo de recibo. Eso sí, las sentencias judiciales, nos guste o no, debemos acatarlas. Y más siendo funcionarios públicos.
Por cierto, aparte del concurso de traslados, esta sentencia influirá en la elección de asignaturas a principio de curso (ya que primará la antigüedad profesional; no la de funcionario de carrera) y en, el caso de supresión de alguna plaza, puede saltar un funcionario que lleve quince años en el centro porque ha entrado alguien en este concurso de méritos que, habiendo sido consolidada su plaza, con los años de interino y funcionario lleva más años trabajados. Tiene muchas connotaciones este cambio. Un cambio que afecta negativamente al funcionario de carrera actual. No solo en educación.
La Universidad Politécnica de Valencia va a desconectar la calefacción “cuando el tiempo lo permita”. Algo de lo que también han llegado instrucciones a los diferentes centros educativos de etapas obligatorias. La imagen de las mantas volverá a verse otro curso más. Y, como siempre, solo se verá en los centros públicos. No olvidemos que, como siempre sucede, los recortes educativos siempre son para los mismos.
Algún día alguien deberá hablar de la cantidad de dinero dilapidado en educación en ciertas cosas. Y la cantidad de horas de calefacción y aire acondicionado que podrían tenerse. Bueno, más allá de eso… ¿os imagináis que en lugar de gastarse, como van a hacer este curso, la friolera de cerca de 50 millones de euros en “mentores digitales”, se invirtiera ese dinero en mejorar la educación? ¿U os imagináis que en lugar de ofrecer cursos, con dinero público, para que lo den amiguetes, de cosas que nada tienen que ver con la educación o que han demostrado ser un bluf, se usara ese dinero en mejorar los centros educativos? Nada, por suponer.
No podía faltar, en el primer mes de curso, el ataque a los profesionales de la educación. Especialmente desde determinados medios de comunicación. Este mes les ha tocado al profesorado de Matemáticas. El que viene, seguramente si eres docente, te va a tocar a ti. No hay nada más triste que ver cómo desde algunos medios, financiados por algunos intereses poco educativos, atacan a los profesionales que se dedican a un determinado ámbito laboral. Y los docentes, en los últimos tiempos, siempre estamos en la mira.
Siguiendo con el ataque a los docentes, está el tema de la bajada de sueldo (que se vende como una subida), diciendo que con lo mal que están las cosas, los docentes deberían volver a rebajarse el sueldo. Estamos en una sociedad en la que, por desgracia, lo importante no es reivindicar tus derechos laborales. Lo importante es reivindicar la desaparición de los derechos laborales de los demás. Sí, hay mucho gilipollas suelto que, por desgracia, también tiene derecho a votar. Bueno, con los políticos que han gestionado la educación en los últimos tiempos, es lógico que sucedan ciertas cosas.
¿Y los congresos educativos? No puedo acabar esta nueva entrega de “La Tiza 2.0” sin recordar algunos de los congresos educativos, ya realizados o realizables en el futuro. Es que son un reflejo real del aula. Bueno, va a ser que no, pero con la cantidad de docentes que acuden a ellos, uno ya no sabe muy bien en qué nivel cultural taxonomizar al profesorado. Lo sé. No son muchos, pero vociferan mucho.
Y ya estaría como segundo número. Me prometí escribir una revista a la semana y, desde la última ya ha pasado algo más de un mes. Es lo que tiene empezar el curso en un aula de verdad con alumnado de verdad. Otros tienen tiempo para ir a hacer “sorprendizaje”, “ir a charlas con el gurú de turno” o, simplemente, “montar materiales como si no hubiera un mañana”.
Por cierto, ¿sabéis cómo se hacen las programaciones de primero y tercero de ESO? No os preocupéis. Los inspectores están formándose para saber hacerlas y, cuando las tengan hechas, seguro que vendrán a vuestro centro a explicar cómo se hacen.
Espero que os haya resultado de interés. Compartir esta entrada en las redes sociales hará que podamos ser más porque, al final, todo esto de la educación es mucho más de comunidad que de individualidad.
Hasta el próximo número, y os recuerdo que suscribirse a La Tiza 2.0 es gratis.